Hace poco menos de un mes la Policía Nacional de Granada desmanteló
una estafa de las que ya no quedan. Un estafador de los de largo
historial delictivo puso un anuncio ofreciendo trabajo en las obras del
metro de la capital. Creo una empresa de cero –algo sencillo de
registrar–, supuesta contratista. Contrató una gestora y a dos academias
de cursos de prevención de riesgos laborales. Y cuando tuvo alrededor
de 50 candidatos, con los contratos tramitados, les advirtió que debían costear los cursos sobre el primer sueldo, poniendo cada uno 200 euros por adelantado. Y de él nunca más se supo hasta que lo detuvieron.
Francisco López, del Grupo de Delitos Económicos de la Policía de
Granada, explica que es una estafa "rara" porque ya casi no se dan, pero
que "sólo necesita invertir tiempo, con ir dejando a deber los trámites
se va saliendo adelante". Es una operación "de estafa habitual que ha
visto un nuevo tipo de víctimas: los parados. Los trabajos falsos se están extendiendo". Eso sí, advierte: "es más fácil por internet. En persona para conseguir credibilidad hay que currárselo".
Falsos trabajos en el extranjero
Francisco Rodríguez, jefe del Grupo de Delitos Tecnológicos, explica:
"una estafa muy común de reciente aparición es la de los falsos
trabajos en el extranjero. Ahora mismo hay muchos españoles que quieren
marcharse a trabajar a Reino Unido, en trabajos sin cualificación,
hoteles o cosas así. Reciben tu currículo y te dicen que estás
seleccionado. Te empiezan a pedir datos para gestionar entonces el
visado, para darle credibilidad. Y sólo al final, piden el dinero
necesario para el supuesto papeleo en extranjería. Unos 700 euros, aunque a veces lo piden en libras o en dólares. Y claro, una vez entregada la cantidad, nunca más se supo".
Rodríguez añade que la crisis ha multiplicado en internet las estafas
a gente que busca empleo. "En realidad, son estafas que han existido
siempre, pero ahora los delincuentes se han dado cuenta de que tienen
muchas más víctimas posibles". Por ejemplo, la del 'fishing', en la que
el estafado puede contribuir sin saberlo al blanqueo de dinero
accediendo a usar su cuenta para traspasar cantidades de dinero a la
empresa inexiste que supuestamente lo ha contratado. "Trabajos fantasmas
que sirven para aprovecharse de la desesperación".
El Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación (Inteco) calcula que en la actualidad cerca del 25 por ciento de los fraudes en internet provienen de supuestas ofertas de trabajo. Los sindicatos, como CCOO, ya han comenzado su propio trabajo de prevención tras detectar el aumento de este tipo de quejas, en concreto en Granada descubriendo incluso nuevos tipos de fraude, que incluyen también estafas telefónicas para los parados.
Es una de las modalidades más novedosas detectadas por Rodríguez y su equipo, la de la falsa entrevista telefónica.
Colocan un anuncio en el que se piden trabajadores de oficina en un
puesto que no requiera mucha cualificación. Cuando la gente envía su
currículo, les dicen que están preseleccionados y les dan un número de
teléfono en el que deben pasar la entrevista final. Pero es un número de
tarificación especial donde cada minuto les cuesta alrededor de 1,87
euros y los marean haciéndolos esperar eternamente. Y el trabajo no
existe, por supuesto.
Más víctimas suceptibles de caer
Inteco, en su informe sobre seguridad en la Red de 2011, no considera
que el tipo de estafa de falsos trabajos esté aumentando desde la
crisis, pero sí que existen más víctimas susceptibles de caer
en ellos y que ha aumentado el número de fraudes en los que se produce
una pérdida de dinero. Normalmente, la captación de currículos con
trabajos falsos no pasa de la falta porque la empresa de turno lo que
pretende es captar datos personales que luego vende para enviar
publicidad sobre cursillos para desempleados y otras variantes.
La recomendación básica es no fiarse: "porque un
anuncio esté en infojobs no se vuelve auténtico, la web es como un
corcho donde cualquier pone lo que quiere", explica Rodríguez. «"No
recibir ni enviar dinero de personas a las que no se conozca, no cobrar
cheques, no pagar".
Esta última es básica: "es absurdo que alguien tenga
que pagar a otra persona que se supone que le va a dar trabajo". Y en
el caso concreto de los falsos trabajos en hoteles, por ejemplo, "es
mucho más sencillo: métanse en la web del hotel que se supone que
contrata y contacten con los datos que den allí, y no con los del
anuncio, para comprobar que la oferta es auténtica. Internet sirve para
defenderse del mismo internet".
1 comentaris:
que gentuza
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