Como en el viejo oeste, el cartel “Wanted” (se busca) está a la orden del día para cazar delincuentes, aunque con mayor éxito gracias a Internet, la prensa y la televisión. La organización Crimestoppers (algo así como “Los que paran el crimen”), en colaboración con las autoridades británicas y españolas, ha dado hoy a conocer en una rueda de prensa en Madrid la identidad y fotografías de cinco nuevos criminales que podrían estar ocultos entre las amplias colonias de ingleses que residen bajo el sol de España, al tiempo que ha recordado las identidades de otros cinco peligrosos asesinos.
Éstos son los cinco nuevos fugitivos que podrían haber elegido España para ocultarse:
- Dominic Stephen Powell (21/04/1963): se le busca para juzgarlo por varios delitos de abusos sexuales a menores, intento de violación y tomar imágenes deshonestas de niños. Ya fue procesado y cumplió condena, pero en 2009 huyó a España cuando aparecieron nuevos delitos.
- Simon Dutton (24/10/1976): buscado por tráfico de drogas, tras una operación en la que se encarcelaron a diecisiete personas y se confiscó cocaína por un valor en la calle de unos dos millones de euros. Él consiguió escapar. Es un sujeto peligroso y violento.
- Andrew Terrence Moran (30/03/1982): condenado por su participación en un robo con armas. Escapó del tribunal que lo estaba juzgando tras agredir a un guardia de seguridad. Fue condenado en rebeldía.
- Kirk Bradley (07/09/1985): estaba detenido por tenencia de armas y conspiración con el propósito de poner en peligro la vida de los demás cuando unos compinches le ayudaron a escapar durante un traslado en un furgón policial en Manchester.
- Tony Downes (16/02/1986): también logró huir en las mismas circunstancias que el anterior, cuando era llevado al tribunal de Liverpool. Se le acusa de tenencia de armas con el propósito de poner en peligro la vida de los demás y conspiración parea infligir daños a la propiedad.
Los otros cinco fugitivos, cuyas identidades ya se conocían, son especialmente peligrosos, pues todos tienen delitos de sangre:
- Derek McGraw Ferguson (10/01/1964): mató a un hombre en una taberna cerca de Glasgow. Es muy violento
- William Thomas Robert Paterson (10/09/1979): se le busca por su relación con el asesinato a tiros de un hombre en el aparcamiento de un supermercado en Robroyston (Glasgow). Las autoridades británicas lo definen como “violento y peligroso”.
- Allan James Foster (15/08/1972): asesinó a una persona en 2006 en South Shields y también se le busca por robo. Está vinculado con Mallorca y Canarias, donde podría haberse refugiado.
- Kevin Thomas Parle: guarda relación con el asesinato de dos personas en Liverpool en 2005, uno de ellos un chico de dieciséis años.
- Christopher Guest More (30/12/1977): acudió a una granja junto con cuatro cómplices en 2003 para robar. Al no obtener el dinero, agredieron con tanta violencia a las cinco personas que estaban en la casa que uno de ellos murió a causa de los golpes. También se le busca por el intento de asesinato de otro hombre. Huyó a España, según las sospechas de la policía británica. También podría ocultarse en Malta.
Con esta advertencia, Crimestoppers y la Agencia contra el Crimen Organizado (SOCA en sus siglas en inglés) lanza su sexta campaña de la Operación Captura, una iniciativa que desde su primera edición, en octubre de 2006, se ha saldado con la detención de 46 de los 60 criminales británicos más buscados, de los que 25 han sido arrestados en España. Crimestoppers difunde en su página web las fotografías de los delincuentes bajo el título “Los Más Buscados del Reino Unido”.
En el acto celebrado en dependencias de la Embajada del Reino Unido en Madrid, James Brokenshire, secretario de Estado para el Crimen y la Seguridad del gobierno de James Cameron, ha destacado la importancia de la colaboración de España para encontrar a estos delincuentes. “En un día cualquiera de verano sólo al aeropuerto de Málaga llegan 27 vuelos procedentes del Reino Unido”, ha declarado Brokenshire para dar cuenta de la facilidad con la que un criminal británico puede pasar desapercibo en España. Al acto también han acudido el presidente de Crimestoppers, Lord Ashcroft, y los dos máximos responsables de la policía judicial española, el comisario general Juan Antonio González (Policía Nacional) y el general jefe de la Policía Judicial de la Guardia Civil, Francisco Rico.
Fuentes de la organización aseguran que gracias a gracias a la colaboración ciudadana y el apoyo de los medios de comunicación cada día son detenidas y acusadas 23 personas, principalmente en el Reino Unido. Desde su puesta marcha, Crimestoppers ha recibido más de un millón de llamadas que han sido de utilidad para la impresionante cifra de 108.000 detenciones. También ha ayudado a la policía a recuperar bienes valorados en más de 115 millones de libras (131 millones de euros) y confiscar drogas que casi duplican esa cuantía.
Crimestoppers es una organización sin ánimo de lucro fundada en 1988 por el magnate Michael Ashcroft, miembro de la Cámara de los Lores, vicepresidente del Partido Conservador –ahora en el gobierno- y uno de sus mayores donantes. Su central de datos recibe y procesa llamadas (en España el número es 900 555 111) y correos electrónicos de ciudadanos anónimos que pueden aportar información para la resolución de crímenes. A los informantes se les garantiza confidencialidad absoluta.
Lord Ashcroft es todo un personaje, Caballero Comandante de la Orden Más Distinguida de San Miguel y San Jorge, creada en 1818 por Jorge, Príncipe de Gales (luego Jorge IV). El fundador de Crimestoppers no ha estado exento de polémica, ya que su condición de doble nacional británica y de Belice (creció allí, pues su padre era el embajador colonial en el pequeño país centroamericano) le ha ahorrado millones de libras en impuestos, lo que ha sido objeto de crítica por parte del partido Laborista. Creó su fortuna con empresas de limpieza.
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